En Pompeya, los adultos mayores están de parabienes

De nuestra redacción.- Los jóvenes de la tercera y hasta de la cuarta edad que concurren habitualmente a los programas de nuestra comuna para la “juventud prolongada”, están de parabienes: en virtud de una denuncia presentada por vecinos de los clubes de reunión, fue eliminada la música del espacio al aire libre.

Sucede que algunos vecinos lindantes al lugar de Pompeya en que se reunían los mayores, estaban molestos por los fuerte de la música con la que solían bailar, aprender folklore o hacer actividades tales como gimnasia.

 La desazón de los “jóvenes de siempre” tenía sus motivos: mediante los sones de piezas populares, los reeducadores recuperaban a distróficos musculares y a discapacitados motores utilizando la técnica de la gimnasia acuática.

 Cuando parecía que la alegría llegaba a su fin, se encontró un punto de equilibrio: la música, desde luego, volvió a sonar y los viejos, nuestros queridos viejos, que se niegan a caer derrotados por la enfermedad o por la tristeza, tomaron al viejo rito de izar la bandera mientras cantaban, como en la lejana época escolar, aquellas estrofas que comienzan diciendo:“Alta en el cielo, un águila guerrera, ahora se eleva en vuelo triunfal. Azul un ala, del color del cielo; azul un ala, del color del mar…”. El sol y el viento les golpean el rostro. Pero no retroceden: avanzan, avanzan siempre, porque saben, como Frank Capra, “qué bello es vivir”.